ROBERTO LUNA
Hoy en día la flexibilidad se ha convertido en una de las diez competencias claves para el futuro. Así es que para manejar la incertidumbre y complejidad de los mercados actuales, se requieren cada vez más líderes ambidiestros, empáticos, que sepan cambiar sus estrategias y pensamientos, y trabajar múltiples conceptos y áreas a la vez.
De modo que en la medida que esto se transmita a la organización, se podrá hablar de gestión del cambio cultural y estratégico. La flexibilidad viene marcada por la apertura mental, por la aceptación de la diversidad, por el énfasis en la innovación, por la comprensión de los mapas mentales y la generación de ideas interdependientes. Además de una orientación hacia el aprendizaje y la exploración, hacia la gestión del talento y el desarrollo de las potencialidades.
Analizaremos los principales retos que debemos afrontar para poder comprender y desarrollar la competencia de la flexibilidad mental, pues su mejora y desarrollo está relacionada con la competitividad, la innovación, la confianza y el equilibrio emocional.
De modo que en la medida que esto se transmita a la organización, se podrá hablar de gestión del cambio cultural y estratégico. La flexibilidad viene marcada por la apertura mental, por la aceptación de la diversidad, por el énfasis en la innovación, por la comprensión de los mapas mentales y la generación de ideas interdependientes. Además de una orientación hacia el aprendizaje y la exploración, hacia la gestión del talento y el desarrollo de las potencialidades.
Analizaremos los principales retos que debemos afrontar para poder comprender y desarrollar la competencia de la flexibilidad mental, pues su mejora y desarrollo está relacionada con la competitividad, la innovación, la confianza y el equilibrio emocional.
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